Ingredientes:
- 250 gr. de harina.
- 200 gr. queso crema (tipo Philadelphia).
- 100 gr. mantequilla.
- 1 pizca de sal.
- En primer lugar, ponemos la harina junto con la sal en forma de volcán en la mesa de trabajo, y añadimos el queso crema y la mantequilla. Amasamos muy bien hasta que tengamos una bola parecida a esta
Es una masa blandita, y en mi caso la he amasado en la panificadora, como podéis ver
- Una vez amasada, envolvemos la masa en plástico film y la llevamos al frigorífico durante al menos 3 horas.
- Una vez fría la masa, espolvoreamos la mesa de trabajo con azúcar y vamos extendiéndola con cuidado haciendo un rectángulo. Podemos ir espolvoreando azúcar a medida que la masa la vaya absorbiendo para poder extenderla mejor.
formado el rectángulo |
- Precalentamos el horno a 200 º y vamos enrollando la masa desde la parte de abajo hasta la mitad del rectángulo y lo mismo desde la parte de arriba. Al mismo tiempo vamos apretando ligeramente para que se vaya pegando la masa.
Vista de la parte lateral |
- A continuación, vamos cortando el rulo en rodajas del mismo tamaño y ponemos las palmeritas en la bandeja del horno cubierta con papel de hornear o con una lámina de silicona. Una vez todas colocadas, apretamos suavemente cada palmerita con el dorso de una cuchara para darles una forma más bonita.
- Por último, introducimos la bandeja en el horno unos 20 minutos, o hasta que estén un poco doradas. Cuando las saquemos del horno, las dejamos enfriar sobre una rejilla.
Nota: al principio, cubrí algunas palmeritas con azúcar glass, y me gustaron mucho más que sin él, así que terminé cubriéndolas todas. Si sois muy golosos, podéis añadirle a la masa algo de azúcar para que queden más dulces.
Mi hija hincándole el diente a las palmeritas |
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